Los datos oficiales muestran una tendencia sostenida en los ingresos y desde la entidad explicaron que este registro es más visible en los establecimientos de mayor escala y que responde a una relación de compra-venta que por el momento se mantiene favorable.
Los feedloteros también reconocieron que este porcentaje de ocupación representa el pico máximo para el año y que comenzará a registrarse un vaciado paulatino en los corrales.
SEGUIRÁ LA SOBREOFERTA DE CARNE
Esto se traducirá en una mayor oferta de hacienda para el mercado doméstico, situación que postergará -al menos por un tiempo- el ajuste en los precios de los bovinos.
Un dato a tener en cuenta es que el margen rentable de los corrales sufrió un retroceso, en parte por un leve aumento en la invernada, pero sobre todo por la suba en los costos de alimentación.
INGRESOS SOSTENIDOS
En el segundo semestre del año, se siguen percibiendo los efectos de la seca en el negocio, con un ingreso a corrales que no afloja y un nivel de faena que creció un 13% interanual entre enero y junio. Estos factores, sumados a un precio de la invernada que no termina de repuntar, agilizaron el traslado de hacienda a los feedlots.
Y agregó: “Saldrán animales mas livianos, con lo cual habrá alguna oferta puntual en esta categoría”.
El directivo remarcó que la evolución en el precio del gordo estará atada al comportamiento de otras generará presión sobre el novillo cuando empiece a disminuir la oferta de la vaca.
En el caso de los márgenes rentables para la actividad, cortaron la tendencia alcista de los últimos meses y el negocio quedó -en el mejor de los casos- empatado. De acuerdo a los cálculos de la CAF, el número final, sin incluir costo financiero, asciende a $280 a favor. Pero si se agrega el costo financiero, el número cambia y pasa a $37.780 de pérdida por cabeza engordada.
Fuente: Infocampo13/07/2023