La actividad estará representada por especialistas que brindarán charlas y por empresas proveedoras.
Durante los últimos años, el consumo y la producción de carne porcina aumentaron fuertemente en Argentina. Dentro de ese marco, Expoagro le dará un lugar preponderante a ese sector. Por primera vez habrá una carpa sobre esta temática y un ciclo de charlas técnicas sobre la actividad, que contarán con la presencia del médico veterinario del INTA Marcos Juárez, Jorge Brunori, quien trabaja específicamente en el Grupo Porcino. Durante esa jornada, el INTA también lanzará la 12ª edición de FeriCerdo, que se realizará el 24 y 25 de agosto en dicha localidad cordobesa.
Ya son nueve las empresas que expondrán sus productos en la carpa porcina y realizarán disertaciones en el auditorio de ganadería. Entre ellas, Hormitec (pisos de slat), Provimi (nutrición animal, que contará con dos stands), Extrutex Importador (Bombas Dosatron), Biofeed (nutrición animal), Los Robles-Adifib (servicios en nutrición), Textil Calchaqui (cortinas perimetrales para granjas), Impec (tratamiento de efluentes con bacterias), Termoplast (equipamientos para granjas) y Argenfeeders (comederos de acero inoxidable).
Además, con la intención de que más productores se interesen en el sector, lindero a la carpa habrá un circuito demostrativo y dinámico donde se van a exponer los distintos ciclos productivos del cerdo: gestación, maternidad, destete, desarrollo y terminación. Allí también se abordará la importancia de los implementos, equipamientos y una buena dieta nutricional en cada período del animal.
A su turno, la disertación de Brunori abordará “El nuevo escenario de la producción porcina nacional. Los desafíos de la próxima década”. El especialista tratará temáticas como consumo interno, importaciones, exportaciones, eficiencia y asociativismo.
“La idea es comentar la situación actual de esta actividad, que en la última década y media creció a un ritmo constante en producción de carne y animales faenados. Fundamentalmente se consolidó en el mercado interno con un fuerte crecimiento del consumo en fresco. Según los datos del Ministerio de Agroindustria en 2016 se alcanzaron los 13 kilos por habitante. Para la Asociación de Productores Porcinos se superaron los 15 kilos. Pero hay que tener en cuenta que en la década del 90 había un consumo promedio de entre 5 y 6 kilos. Estos números marcan el crecimiento exponencial de los últimos años”, asevera Brunori.
Para el experto, esta realidad también fue ayudada por la retracción del consumo de la carne vacuna, que bajó de 70 a 54 kilos por habitante en los últimos 20 años. “Sin ninguna duda, la crisis del sector bovino entre 2008 y 2009, que hizo bajar más de 10 millones de cabezas generando un estampido del precio, abrió una puerta a las carnes alternativas de pollo y cerdo. Esto no quiere decir que nos alegre la situación de la actividad bovina. Lo lógico sería que ese sector pueda recuperarse en el mercado de exportación para mantener el consumo interno en los 55 kilos de carne bovina y alcanzar más de 800 mil toneladas exportadas. Así se mantendría una demanda de unos 40 kilos de carne aviar y quizás en unos 10 años estemos hablando de más de 20 kilos de consumo de porcinos. Eso sería mucho más racional y positivo para el país”.
Durante la charla, Brunori también abordará el complejo escenario que se vive a raíz de la quita de retenciones al maíz y la disminución en la soja, alimentos necesarios para la cría de cerdos y que representan el 70% de los costos totales. “Esas medidas produjeron un aumento de entre 40% y 50% en los costos. Sumado a eso, el precio del capón no subió mucho debido a un estancamiento del consumo. Esta disparidad generó una ecuación más ajustada”, explica.
En Expoagro también se pondrá el foco en el mejoramiento de la eficiencia y la escala para sortear estas dificultades. “Algunos productores, que no tenían una eficiencia acorde, entraron en rentabilidad negativa y otros abandonaron la actividad. En los próximos años, la rentabilidad del sistema productivo estará basada en la eficiencia y la escala”, finaliza Brunori.
Fuente: Clarín Rural