El viernes llevamos a Bianca al veterinario a ponerle la vacuna de la rabia que ya le tocaba. En esa visita siempre le hacen una revisión y ya nos indicó el veterinario que para la próxima visita le haríamos una limpieza en la boca.

Muchas personas no saben lo importante que es mantener la boca de nuestro perro en perfecto estado.

La boca de los perros hay que recordar siempre que es un ambiente alcalino por lo que resulta más favorable la formación de placa.

Si esa placa no la retiramos a tiempo y se queda en la boca del perro por mucho tiempo, se convierte en sarro. EL sarro es muy duro, tiene huecos y ahí se acumula las bacterias. Las bacterias son las encargadas de producir daños en las encías de nuestro perro.

Una de las enfermedades que se puede desarrollar en la boca de nuestro perro es la gingivitis que es la inflamación y sangrado de las encías.

Si la gingivitis no se trata adecuadamente, puede llegar hasta la raíz donde puede provocar hasta pérdidas de piezas dentales.

Otra de las enfermedades es la periodontitis, que es una enfermedad oral grave que de igual manera hay que tratar a tiempo para que no vaya a más.

Si tu perro acude al veterinario habitualmente y pasa sus revisiones periódicas, la boca de nuestro perro está siendo controlada por nuestro veterinario.

Si no acude tanto al veterinario, hay que observar que nuestro perro no tiene las encías inflamadas, no tiene mal aliento, no sangra, no tiene dificultad al comer o no tiene bultos en la boca. Si tuviera algo de lo mencionado, hay que llevar al perro al veterinario.

La mejor manera que tenemos de ayudar a nuestro perro y a que tenga una salud bucal correcta es cepillándole la boca a diario, dando juguetes para que mastique o con premios multifuncional, esos premios que sirven para la limpieza de la boca.

Fuente: www.mascotas.hola.com