El invierno llegó con todo gracias a una ola de frío polar que se extendió por buena parte de la semana pasada.
Los animales domésticos también sufren del frío, especialmente aquellos que no han encontrado todavía un hogar definitivo que los cobije.
Por esto, el centro comunitario Ory, que brinda contención a personas con discapacidad intelectual leve y moderada, trabaja en una iniciativa para abrigar a los perros en adopción durante esta temporada.
Con la guía de los miembros del taller Arteterapia y Emociones, han empezado a confeccionar mantas que donan al refugio El Campito, que hospeda a perros ancianos, lisiados y no videntes.
Gracias a Ory, los “camperitos” pueden esperar bien abrigados la oportunidad de sumarse a una nueva familia que les brinde ese amor que les faltó en los comienzos de su vida.
Fuente: La Nación