El último de los perros sobrevivientes de las operaciones de rescate luego de los atentados del 11 de septiembre de 2001 en Nueva York murió en una clínica veterinaria de Houston, Texas, informaron fuentes locales.
Bretagne era una Golden Retriever y fue sacrificada a los 16 años. Tenía apenas dos cuando, junto a su instructora Denise Corliss, formó parte de las operaciones de rescate de la Texas Task Force 1 que fue enviada a Nueva York luego del derrumbe de las Torres Gemelas, en busca de eventuales sobrevivientes.
Bretagne permaneció en la zona del desastre en Nueva York durante 10 días y trabajaba un promedio de 12 horas diarias, al igual que cientos de equipos de rescate provenientes de distintas partes del mundo.
“Cuando llegamos al World Trade Center no creía lo que tenía ante mis ojos”, recordó Corliss. “Luego miré a Bretagne y ella reaccionó rápido y estoicamente, comenzó a trabajar”.
La perra también formó parte de las operaciones de rescate luego del paso devastador del huracán Katrina en Nueva Orleans, Luisiana. Además, durante sus últimos años, Bretagne pasó varios días como parte de un equipo que fomenta la lectura entre los niños.
Fuente: La Nación