Destacando que ocho de cada diez problemas relacionados con la alimentación provienen de un mal manejo, el PhD. Gustavo Schuenemann compartió su visión durante el encuentro anual de APROCAL.

 

En el marco del VI episodio de “La vaca alrededor de la ubre” organizado por APROCAL (Ver recuadro), el PhD. Gustavo Schuenemann, quien es profesor del departamento de Medicina Veterinaria preventiva de la Universidad estatal de Ohio en Estados Unidos, compartió con los cientos de personas que (en forma virtual) participaron de la jornada, todo su conocimiento sobre el correcto manejo de la vaca en transición para mejorar la producción y el bienestar animal.

“La actividad lechera es el arte de controlar variaciones y manejar riesgos”, contextualizó el profesional egresado de la Facultad de Ciencias Veterinarias de Tandil, en Buenos Aires.

Además, compartió una “fórmula” infalible para producir leche, que consiste en el consumo de agua -cantidad y calidad- sumado al consumo materia seca -formulación de la dieta-, buen manejo y ambiente. Y también, claro, el bienestar animal es fundamental.

“Cuando realizamos evaluaciones en establecimientos lecheros, debemos mirar que se cumplan las cinco libertades: libre acceso al agua y alimento, confort -camas, estrés térmico-, libre de expresar el comportamiento natural (interacciones con instalaciones, entre animales y con humanos), libre de dolor, enfermedades y lesiones; y libre de angustia y temor a las personas”, completó Schuenemann en lo que fue la apertura del evento anual de APROCAL, conducido en su formato virtual por el editor de MOTIVAR, Luciano Aba.

“¿Cuál es el objetivo del pre parto y del post parto?”, preguntó mediante la plataforma Zoom el disertante a la audiencia que, haciendo uso de un múltiple Choice, no lo dudó: “maximizar confort y consumo de materia seca; prevenir hipocalcemia y evitar pérdidas de condición corporal”.

¿Cómo implementar un programa en transición?

“Si miramos el componente tiempo, el parto es el punto de partida para la madre y la ternera. Desde el punto de vista de la vaca, el secado es muy importante debido a que hay que mantener constante el consumo de materia seca”, explicó. Y continuó: “Generalmente tiende a bajar a medida que llegamos al parto -asociado al proceso del parto y a las hormonas-. Esto determina la Condición Corporal (CC) de la vaca”.

No manejar CC tiene su impacto, “la misma debe ser constante en el periodo de secado y en preparto. Es más fácil cambiarlo desde el punto de vista fisiológico durante la lactancia, pero no en el secado. Esto es importante porque en muchos casos se agrupan animales, se secan, se pasan al preparto y ahí se les otorga una dieta diseñada -aniónica- para prevenir la hipocalcemia”, explicó Schuenemann.

Asimismo, remarcó la importancia de observar el descanso de las vacas, sobre todo en pre y post parto: son los grupos que más están sensibles al consumo de materia seca.

Entonces, ¿cuál es la distribución del tiempo (hr / día) en base al comportamiento normal en vacas lecheras? “Van a estar acostadas entre 12-14 horas en el preparto y cuando están frescas, entre 9-11 hrs /día, debido principalmente a la rutina de ordeñe; van a comer y rumiar entre 6-8 hr / día; van a tomar agua entre 0,5-1 hr / día; y en el ordeñe entre 3-4 hr/día”, reforzó.

Y profundizó: “El objetivo es evitar la caída de consumo en preparto, ya que eso determina el consumo en postparto, indistintamente de cuánta comida tuvo la vaca. Si estuvieron perdiendo peso es muy difícil que puedan volver a comer bien”.

Schuenemann dejó en claro también que, generalmente, “una vaca a los 7 días del parto ya recuperó el consumo de MS que puede soportar las demandas de la lactancia. A la vaquillona le lleva el doble de tiempo; es susceptible a perder mucho peso”.

El descanso: una variable elemental

“Cuando uno busca resolver los problemas, tiene que solucionar cuestiones metabólicas, ya que la hipocalcemia y cetosis determinan el sistema inmune. Si resuelvo esto y además hay confort, tengo consumo. Al aumentar el consumo de MS, aumenta la producción de leche y disminuyen los costos de alimentación”, puntualizó el disertante desde los Estados Unidos.

Al garantizar un buen consumo, automáticamente la reproducción sube independientemente de los programas de reproducción utilizados (aumentan tasa de concepción, de parición y caen abruptamente los abortos). “De esta manera mejoramos la salud, y por ende la longevidad de las vacas. ahí es donde el productor ve la rentabilidad”, agregó.

“Asimismo, es importante el confort ya que cuando está acostada tiene un 30% más de flujo sanguíneo en la glándula mamaria en comparación a cuando está parada. Esto significa un aumento en la producción de leche”, completó Schuenemann.

Los bovinos de leche tienen una marcada necesidad de descansar, y a la vez tiene prioridad sobre el consumo de MS. “Por cada minuto de descanso perdido, la vaca sacrifica 1 minuto de consumo de MS. Por ejemplo, en el caso de una vaca en preparto o fresca si disminuye su descanso 2,5 hr/d, va a disminuir 40 minutos/día de consumo de MS lo que equivale a 1,5 – 2 kg que dejó de ingerir el animal”.

Si evaluamos cuáles son los factores que afectan este confort, Schuenemann asegura que son: la condición de las camas o corrales; consistencia del comedero/TMR; carga animal y frecuencia de ordeño (2x, 3x o 4x); programa de vaca fresca (mayor 1hr/d) y agrupar vacas/vaquillonas pre y post parto (vacunación preparto).

26/10/2020

Fuente: PeriódicoMotivar