Charly Entrala tenía muy claro lo que quería hacer. Fue así como empezó a buscar un auto hasta que como un flechazo, un Peugeot 404 fue el elegido para la aventura de su vida. Lo restauró, lo ploteó, dejó su trabajo después de reunir los recursos necesarios y salió a la ruta con un mensaje muy especial. ¿Sus copilotos?: Saviola y Whisky, sus amados perros.
Fue así como un 19 de diciembre empezó “Argentina con mis perros”, la travesía que ya lo llevó desde San Fernando, en la provincia de Buenos Aires donde vive a Ushuaia y ahora lo trajo a San Juan, una escala en su recorrido a La Quiaca donde va concientizando sobre castración de animales de compañía y tenencia responsable.
“Estoy cumpliendo el sueño de mi vida que es viajar por mi país y conocerlo bien. Me acompaña mi perra Saviola que tiene 15 años y Whisky, el único de los perros que rescaté y no di en adopción. Vamos viajando en un Peugeot 404 modelo ´71, un señor auto, y llevamos el mensaje de la importancia de la castración y de la tenencia responsable y desmitificar por ejemplo que no solo se debe castrar a las hembras sino también a los machos. Este no es solo un viaje de una persona con perros; es mucho más que eso”, dijo Charly en una pausa de su visita a San Juan a Diario La Provincia.
El auto tiene frases alusivas sobre la adopción y llama la atención de todos por donde pasa. A quienes se acercan a él les cuenta su historia. “Era chofer de una movilidad que llevaba chicos de una zona rural, desde San Fernando a Luján, en Buenos Aires. Este proyecto lo tengo hace mucho y cuando se dieron una serie de factores pude concretarlo: trabajo, tiempo, plata y ahorro. Nos largamos a la ruta el 19 de diciembre desde San Fernando, con rumbo al Sur por la Ruta 3 y llegamos a Ushuaia bordeando la costa. Nos llevó tres meses de viaje y ahora vamos subiendo por la Ruta 40 para llegar a La Quiaca”, detalló. En su paso por nuestra provincia estuvo por la plaza 25 de Mayo y la Casa de Sarmiento con sus fieles compañeros e hizo nuevos amigos.
“El auto cumplió un año durante el viaje y antes de partir lo restauré y le di cariño para salir a la ruta y tener la menor cantidad de problemas posibles. se va portando muy bien”, resalta y por supuesto, tiene los mejores comentarios sobre sus acompañantes. “Los perros se portan fantásticamente bien. Mi perra Saviola (nombre en honor al jugador que supo ser parte de River), fue mi primer rescate hace 15 años. Y Whisky la rescaté y la tuve en tránsito y adopción pero se quedó conmigo. Ellos van cómodos y es la primera vez que tenemos esta aventura loca. Se fueron acostumbrando a los tiempos, al auto y la ruta. Viajan atrás y miran el paisaje o duermen.
Hacemos tramos cortos porque vamos paseando y paro a sacar fotos y filmar. Por ejemplo, de Mendoza a San Juan hice 150 km. en tres horas a 70 km/ hora. No tengo apuro”.
Cuando llega a una ciudad (en la que se queda el tiempo justo y necesario para que no se estresen sus perros) se encuentra con una situación repetida, casi un ritual. “La repercusión del viaje es muy buena y positiva. La gente se copó con el viaje y el auto. Me reciben y me preguntan qué hacemos y les aclaro que hablo en plural porque somos los perros y yo. Me contactan proteccionistas de todos lados y la problemática es la misma: me dicen “no sabés la cantidad de perros callejeros que hay”. Es la frase de cabecera”.
Y destacó: “a pesar que hay quirófanos móviles gratuitos y recursos del Estado para la salud falta que la gente lleve a castrar sus animales. Son reacios en ese sentido aunque los móviles van a los barrios y los municipios cumplen con la ley. Además no llevan a los machos. Se debe castrar a los animales de compañía, perros y gatos, por una cuestión de salud. Se evitan muchas enfermedades como cáncer de próstata, de testículos, de útero y mamas y también tumores. Le generás calidad de vida a los animales de compañía y el perro no se escapa detrás de una perra en celo y pelea o vuelve lastimado, si es que vuelve”.
Transmitiendo ese mensaje, Charly conoció personas que se contagiaron de su causa y quienes lo siguen a través de su página en Facebook. Pero lo que a él realmente le gustaría es que calen hondo las frases que lleva su auto: “Salvá una vida, adoptá” y “No compres una raza, adoptá uno sin casa”.
Fuente: Diario La Provincia